
La preocupación excesiva por la salud o por enfermar es un problema que puede llegar a ser muy incapacitante debido al gran malestar que produce a la persona que lo padece y también para las personas que lo rodean.
Podemos entender esa preocupación excesiva como una tendencia o aprendizaje que nuestra mente y cuerpo han desarrollado por distintos motivos (enfermedades previas, experiencias familiares de enfermedad o muerte, haber vivido situaciones muy estresantes o traumáticas, etc.) y que es posible de cambiar para que se convierta en una preocupación normal y ajustada.